100 Luck and the Dragon Tamer Skill! Arco 1-19.2

Capítulo 19: Una Batalla de Fuego y Hielo (Parte 2)


Mirando arriba, Kataryna vio tres ataques viniendo justo hacia ella. El primero simplemente envió una ráfaga de llamas hacia su dirección, pero hicieron más que solo quemar la hierba. El suelo bajo nuestros pies se agrietó y tembló como resultado del ataque. Era más acertado decir que ella exploto el suelo.

Seryanna y Kleo fueron forzadas a salir del área, mientras yo solo podía observar como un tonto estupefacto.

El segundo ataque, [Hellstorm Tornado], invocó un tornado alrededor de Kataryna, rompiendo y quebrando piezas del suelo como resultado del insano poder del Fénix. La alguna vez calmada pradera que se extendía todo el camino a la gran entrada de la cueva se había convertido en un infierno de fuego de suelo destrozado. El puro poder bruto de esos ataques era aterrador, pero Kataryna seguía de pie.

Respirando con dificultad e invocando cantidades insanas de Energía Mágica, la dragonesa sobrevivió la implacable fuerza y las ardientes llamas de esos hechizos, pero contra el último, ella no fue completamente capaz de defenderse. El ataque [Sparks of the Gods] envió varias bolas de relámpagos hacia ella. El momento en que fue tocada por una de ellas, ella gritó por el dolor mientras todo su cuerpo sentía el choque de eso.

Debido a las flamas y al golpeteo de los relámpagos por todo el lugar, yo no podía decir que estaba pasando exactamente, pero una cosa era cierta, nos las arreglamos para herirla. Algo me decía que ella no estaba muerta, pero tal vez la asustamos lo suficiente para hacerla retroceder lejos de nosotros. Sin embargo, ese no fue el caso.

"¡Hahaha!" la dragonesa de escamas plateadas se carcajeó mientras salía del fuego de un salto, aterrizando no muy lejos de Seryanna. "¡Y pensar que había alguien que podía invocar el poder de un Fénix en este pequeño pueblo! ¡Increíble!" hizo una mueca y me miró.

La dragonesa no salió ilesa. Había un rasguño en su frente, dejando que su sangre tiñera de rojo el lado derecho de su rostro. Su brazo izquierdo tenía toda la armadura destrozada hasta el codo, sangre goteaba de las garras de sus dedos, que salía de los cortes de su brazo. Su mano derecha tenía su armadura quemada, y la serpiente morada dejo una sombra enroscada en ella, pero la serpiente ya se había ido. Sorprendentemente, su cola no mostraba ni siquiera un rasguño, pero se estaba balanceando de lado a lado, mostrando un poco de entusiasmo.

"¡Tú no lo tocarás!" vociferó Seryanna, pero Kataryna simplemente le tiró una mirada y la pateó con fuerza en un costado.

El ataque fue tan rápido y furioso, que la pelirroja apenas y tuvo tiempo de bloquearlo. Ella fue enviada a volar en el muro de piedra sobre la entrada de la cueva, causando un hoyo y esparciendo numerosas grietas alrededor de él.

"¡Hermana!" Gritó Kleo.

"¡Seryanna!" llamé por ella sorprendido, pero entonces vi a Kataryna de pie en frente de mí.

Tragué saliva e inmediatamente pensé ¡Deseo que ninguno de sus ataques me golpeé no importa cuán poco probable o improbable sea eso! ¡Deseo que ella vaya a ser derrotada de una u otra manera! ¡Cualquier cosa sirve siempre y cuando todos nosotros salgamos vivos de esto!

"¡Tú serás un buen juguete para mí!" hizo una mueca.

"¡Lo siento! ¡No estoy interesado! Ya estoy en una relación estable con la pelirroja que acabas de mandar volando en el lado de la montaña." Sonreí incómodamente, entonces evadí.

"Fallé otra vez… ¡Interesante! ¡Realmente interesante!" dijo ella con una gran mueca en su boca mientras que su cola se balanceaba de lado a lado más rápido.

Yo por poco esquivaba sus mortales garras.

"¡No es interesante! ¡Es atemorizante!" me quejé y salté por instinto hacia mi izquierda, sin embargo, no fue un salto completo.

Una vez más, dos picos de tierra emergieron del suelo. Uno donde yo estaba hace unos momentos y otro en donde yo hubiera aterrizado de haber hecho un gran salto.

"¡Interesante! ¡Otra vez!" dijo con una gran sonrisa mientras trataba de atraparme con sus garras.

Saltando hacia atrás, ella falló por unos milímetros. Kataryna no se detuvo y siguió atacándome, cada uno un golpe mortal con el objetivo de matarme. Me sentía como un ratón siendo jugueteado por un gato. Esto resulto ser un juego para ella. Uno en el que ella intentaba atrapar al escurridizo humano.

"¿No podemos solo hablar sobre esto?" Pregunté mientras esquivaba uno de sus ataques.

"¿Es esto suerte o habilidad?" preguntó sorprendida y se preparó para saltar sobre mí.

Como un felino, ella se agacho en sus cuatro extremidades, su cola moviéndose de lado a lado mientras me fijaba con su mirada.

"Soy considerado por ser muy afortunado… Erm, ¿qué estás haciendo?" pregunté tomando unos pasos hacia atrás.

"Voy a atraparte… y una vez que lo haga… ¡Te clamaré como mío!"

"¡No soy un juguete, señorita!" repliqué e instintivamente levanté una mano.

Ella saltó y justo entonces, Jophiel vino volando y me levantó en el aire con ella.

"¡ARGH! ¡Pesas una tonelada! Córtale a las galletas, ¿no?"

"¡Whew! ¡Gracias!" dije, ignorando su comentario sobre mi gordura.

"¡Fallé otra vez!" Kataryna actuaba sorprendida y entonces empezó a perseguirme. "¡Ven aquí abajo!"

"¡De ninguna manera!" sacudí mi cabeza.

Mientras tanto, Kleo fue tras Seryanna para sacarla de los escombros. Mirando eso, no había absolutamente ninguna manera de que yo ganara esto. Esta tipa Kataryna sobrevivió tres ataques a máxima potencia de un Fénix mientras estaba bajo el efecto de una maldición mortal de Kleo y de un ataque de Seryanna. ¿Qué es lo que yo podía hacer para luchar contra ella? En toda esta área, no había siquiera una sola persona capaz de siquiera compararse a sí mismos con el nivel de ella. Si hubiera sido el Brekkar de antes de su enfermedad, entonces tal vez habría alguna oportunidad, pero aparte de él, no conocía a nadie capaz de derrotar a la lunática que estaba tras de mí.

"¡Ven acá abajo! No voy a morder… mucho." Dijo con un ronroneo.

"¡En serio, no!" entonces busque alrededor desesperadamente, tratando de pensar en alguna estrategia, algo en lo que mi suerte pudiera ser usada, pero no había nada con excepción de la montaña.

Con un trago de saliva, le pregunté a Jophiel "¿Puedes volar una montaña?"

"¿Qué es lo que estás pensando?"

"Bueno, no va a pasar mucho antes de que ella se empiece a aburrir y salte a atacarnos, así que es mejor intentar algo tonto y arriesgado yyyy completamente absurdo." Sonreí mientras la miraba.

"Suena como algo que usualmente harían ustedes los humanos cuando se trata de todo." Ella resopló.

"¡Hey! ¡Hacemos cosas inteligentes de vez en cuando también!"

"Tu especie inventó la esclavitud."

"Dije de vez en cuando, ¡no todo el tiempo!" me mantuve en pie por la humanidad.

"Bueno, no puedo volar una montaña. Al menos, no en mi forma actual."

"No hay problema, solo vuela de vuelta a la cueva, arrójame en la entrada, entonces cuenta hasta erm… veinte y dispara tu ataque más devastador hacia el hoyo en el que la dragonesa pelirroja fue lanzada."

"Podrías morir si estás pensando lo que pienso que estás pensando." Me dijo con preocupación en su voz.

"¡No lo haré! ¡Tengo 100 de Suerte!"

"¿100? ¿A qué te refieres? Bueno, como sea. Estoy bastante curiosa también de que es lo que tu pequeño cerebro de guisante puede llegar a traer en este tipo de situación, ¡así que la poderosa YO deberá ofrecer su asistencia hacia ti!" declaró orgullosa.

"Gracias, ¿supongo?"

"¿A dónde vas? Eventualmente voy a atraparte, ¿lo sabes? ¡Así que ríndete de una vez!"

"¡Nooo, gracias! ¡Soy demasiado joven y guapo como para morir!"

"¡Pfft!" el Fénix se rio, y yo me sentí un poco ofendido por eso.

Volando a través de los árboles, Jophiel mostró una habilidad excepcional a pesar de llevar peso muerto con ella. Si yo pudiera disparar bolas de fuego o relámpagos de la punta de mis dedos, tal vez podría derribarla. Realmente, no… eso era altamente poco probable. Alguien como Kataryna solo podía detenerse con habilidades y fuerza bruta, la magia solo era una molestia para ella.

Una vez que estábamos fuera del bosque, pude ver otra vez que tipo de daño causamos en el área. Era masivo. Era irreconocible de cuando yo y Seryanna enfrentamos a los bandidos dragones. En mi mundo, nada menos que ataque de artillería podría haber causado algo como esto. El área estaba simplemente devastada, y un par de árboles estaban en llamas y amenazaban en convertir toda esta área en cenizas. Afortunadamente, unas cuantas nubes de lluvia podían ser vistas en la distancia, así que incluso si eso pasaba, los dragones aún podrían controlar el daño.

Mirando a mi derecha, vi a Kleo ofreciéndole una poción para beber a la lastimada Seryanna. Su armadura estaba actualmente agrietada como resultado del ataque, lo cual era algo, especialmente dado por las ridículas estadísticas que tenía en ella. Mi propia armadura estaba hecha tiras. Yo no sería capaz de sobrevivir a un ataque como ese, y algo me decía que a Kataryna todavía le faltaba para ir con todo contra mí. Me estremecí con el pensamiento de ella haciéndolo.

"Voy a arrojarte y empezar a contar hasta veinte." Dijo Jophiel.

Pensando sobre ello, mi Energía Mágica estaba quedándose seca, así que este era probablemente mi último tiro antes de que Kataryna ganara oficialmente la batalla.

Asentí y tan pronto como sus garras liberaron mi guante, caí en el suelo.

"¡Sabía que te mostrarías por aquí!" dijo Kataryna.

"¡Hiii!" grité y corrí hacia la cueva.

"¡No hay camino por ahí, chico!"

"¡Ya dame un respiro!" lloré.

Mi única opción ahora mismo era correr y seguir corriendo, pero mientras lo hacía, seguí deseando una cosa Cuando Jophiel ataque la montaña, ¡deseo que golpeé una falla estructural que cause que la cueva se derrumbe! ¡Deseo que Kataryna Greorg sea noqueada en esta cueva! ¡Deseo sobrevivir a esta confrontación con Kataryna Greorg! ¡Deseo que sea noqueada por el derrumbe!

Después de unos giros y vueltas, alcancé un cuarto más espacioso, pero repentinamente, el piso se volvió de hielo, me resbalé y golpeé la pared.

"¡Ouch! ¿Qué demonios?"

Mirando alrededor, todo el cuarto estaba cubierto de hielo. Todas las salidas estaban bloqueadas y solo yo y la dragonesa Kataryna estábamos aquí. Fue ella la que lanzó el hechizo.

Después de tragar saliva, me levante y la mire.

"Así que... me atrapaste." Le enseñé una incómoda sonrisa.

"Sí, así parece." Ella inclinó su cabeza y entrecerró sus ojos. "¿Qué es lo que estás planeando?"

"Dominación mundial. ¿Tú?"

"¿Quieres ser un Señor Demonio? Necesitarás al menos 16 generales y un harem de 20 bellezas para que la gente te tome en serio." Suspiró y sacudió su cabeza.

"Espera, ¿eso es realmente posible?"

"Sí. Los Señores Demonio son solo uno de los muchos subordinados de un Rey Demonio, pero esos también son títulos ofrecidos a aquellos que rinden culto a la oscuridad y desean destruir el mundo."

"Bueno, ¿qué es lo que tú quieres?"

"Yo..." ella me miró, entonces el suelo empezó a temblar. "¿Qué es esto?" preguntó frunciendo el ceño, tratando de mantener el balance.

"Ese podría ser mi Fénix." Hice una mueca.

"¿Qué es lo que hiciste?" preguntó sorprendida.

Me encogí de hombros.

Los muros empezaron a agrietarse y el piso estaba cediendo. Los pocos bandidos que quedaban aquí gritaban de miedo mientras trataban de salir, pero la dragonesa congeló la salida. El techo empezó a romperse, y grandes rocas empezaron a caer sobre nosotros. Yo apenas y esquivé una.

"¡Tú!" Gritó Kataryna "¡Que le hiciste a mi hogar!" gritó, pero esta vez un poco enojada.

Estoy demasiado muerto… pensé, y en un parpadeo, ella estaba ahí, justo frente a mí.

No hubo tiempo para reaccionar. Sabía cómo, lo sentí, pero fui demasiado lento comparado con su repentino movimiento. Literalmente fue en un parpadeo. Ella me agarro de la garganta, la apretó y me levantó.

"¡La hora de jugar terminó!" se quedó mirándome, y por primera vez, sentí un poco de instinto asesino por parte de ella, pero aun así era muy débil.

"¡Ugh!" forcejeé para liberarme de su agarre, pero era algo imposible de hacer para mi… esa fuerza de ella era simplemente ridícula.

Mientras ella estaba mirándome, no prestó atención a sus alrededores. El piso estaba cediendo rápidamente, todo cayendo en un abismo, y el techo se estaba resquebrajando y rompiéndose a un ritmo acelerado. Pensé que ambos íbamos a caer, pero cuando el suelo bajo sus pies cedió, ella se mantuvo en el aire, con las alas aleteando y volando en ese punto.

"Tú de verdad crees que un derrumbe podrá…" antes de que tuviera oportunidad de terminar su frase, una gran roca cayó justo encima de su cabeza.

Ahora para explicar unas cosas, una roca es considerada grande cuando es de alrededor de 3 a 5 metros de diámetro. Esta cosa era de al menos 10 metros de longitud y 8 de diámetro, formando un elipsoide con la punta dirigida a su cabeza, básicamente una típica piedrita de manga.

Fue un K.O instantáneo…

"¿Huh?" parpadeé sorprendido mientras ambos empezamos a caer en el oscuro abismo bajo nosotros. "¡¡¡NO QUIERO MORIR!!!" grité con todas mis fuerzas mientras caía junto a la noqueada Kataryna.


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