100 Luck and the Dragon Tamer Skill! Arco 2-51

Capítulo 51: Despertar


[Punto de vista de Seryanna]

Después de que Alkelios se fue, yo estaba reposando en mi cama, con la delgada sabana siendo la única pieza de fábrica cubriendo mi cuerpo, cuando un repentino dolor de cabeza me golpeó. Me sentí mareada y mi sien pulsaba, pero pensé que debió haber sido por cansancio después de que lo hicimos tantas veces.

Había una poción de curación más sobre la mesa, así que me la tomé hasta el fondo y me recosté en la cama.

Mis ojos se sentían como si estuvieran ardiendo y mi estómago también estaba ardiendo. No entré en pánico debido a que no sentía que estuviera en peligro del todo, sin embargo, algo estaba sucediéndome…

Le eché la culpa al cansancio y tal vez un poco de indigestión por las pociones, pero cuando abrí mis ojos, miré todo un poco borroso. Un par de alas captaron mi atención, y cuando miré por la ventana, vi a Kleo en su forma bestial, una hermosa dragonesa negra, mientras volaba alejándose del Palacio.

¿Está ella con Alkelios? Me pregunté y cerré mis ojos.

Después de eso, caí dormida.

Cuando me desperté, ya era cercano al ocaso. Abrí mis ojos y la borrosidad se había ido. Me sentí refrescada y llena de energía.

Debí haber estado cansada.

La esencia de apareamiento todavía se sentía fuerte en el ambiente alrededor mío. Me reí yo misma y me levanté de la cama. Más tarde ese día lavaría las sábanas. No solamente olían, sino que también tenían una pequeña mancha de sangre de mi primera vez.

Mientras caminaba hacia el balde de agua, lavé mi cara y cuello, pero entonces… me di cuenta de algo extraño en mi reflejo.

¿Qué es esto?

Sorprendida, me levanté y apresuré hacia mi espada sacándola de su vaina. Usando una ropa limpia, la limpié unas cuantas veces y miré en la hoja. Lo que estaba reflejado era una vista que nunca creí ver en mi vida…

"Ojos rojos…" dije tragando saliva.

Cuando un dragón experimentaba su Despertar, la primera cosa que cambiaba eran sus ojos. Se rasgarían en la pupila y la mayoría de las veces incluso cambiarían de color. Los míos eran ahora rojos y rasgados, igual que cualquier otro dragón Despertado.

Mientras bajaba la espada, estaba feliz, pero no pude figurar como o por qué…

Mi mirada cayó sobre la cama y entonces recordé lo que Alkelios me dijo en aquel entonces.

Dos de cuatro condiciones fueron cumplidas… entonces… ¿Yo cumplí las dos restantes? ¿Qué eran? Pensé y entonces recordé lo que Kataryna me había dicho acerca del proceso de Despertar también, Despertar significa ser honesto contigo mismo…

Casi inmediatamente, la respuesta a mi pregunta vino a mi mente, y me di cuenta cuales eran esas dos condiciones.

Me reí cuando pensé sobre ello. Me reí muy fuerte.

Cuando me detuve, estaba mirando hacia el techo con lágrimas de felicidad cayendo por mis mejillas.

Alkelios, tu pequeño humano bobo… definitivamente estas subestimando que tan grande eres como hombre…

Después de todo, si no fuese por él, yo nunca habría Despertado.

Las otras dos condiciones para mi Despertar eran simples. La primera era acerca de permitirme a mí misma liberarme de la jaula en la que yo me había encerrado, el mundo de las políticas, las leyes y reglas, de órdenes y justicia dictada. Completé esta cuando me pare sobre las supremas órdenes del Rey y permití que mi ser fuera tomado por Alkelios incluso estando prometida para Draejan. Realmente, ese hombre ya no tenía ningún derecho sobre mí ahora mismo…

La última probablemente fue algo más difícil… aceptar que alguien podría amarme y estar conmigo a pesar de que era una dragonesa No Despertada. Sin embargo, tenía que estar 100% segura dentro de mi corazón que esto era verdad y demostrado en TODAS las formas. Alkelios hizo esto al romper las leyes, arriesgando su vida o el aprisionamiento, todo para estar junto a mi esta noche… él incluso se me declaró, así que por todos los medios… aquel con el que estaba realmente comprometida era con él, no Draejan. Los nobles verían al último como mi pareja, pero la verdad… Alkelios se sobrepuso a él esta noche.

Si… pertenezco a Alkelios ahora, y él es mío… y… no dejaré que nadie cambie este HECHO. Pensé mientras convocaba una pequeña bola de fuego con facilidad.

Ni siquiera necesité realizar un cántico esta vez… debido a que este era mi elemento.

[Punto de vista de Alkelios]

"¿Aun no llegamos?"

"Si preguntas eso una vez más, te voy a arrojar fuera de mi espalda." Rugió Kleo.

Después de mi plática con el Rey de Albeyater, la cual terminó sorpresivamente bien… en el sentido de que aún tenía mi cabeza en su lugar, llamé a Kleo como planeamos y entonces volamos juntos fuera de Drakaria. Dado que ambas Kleo y Kataryna eran reconocidas como parte del grupo de la Tercera Princesa ahora, los guardias no hicieron ninguna pregunta respecto a quien eran y adonde se dirigían.

Como tal, fueron capaces de sacarme de ahí con facilidad.

Ahora, dos días después, esta era la segunda vez que Kleo volaba, y teníamos al Bosque Seculiar a la vista. En media hora o menos lo alcanzaríamos.

"¿Estás listo?" preguntó Kataryna.

"Hicimos los últimos ajustes esta mañana. Todo se encuentra aquí." Toqué el anillo [Bolso], cuyo cántico no era tan fácil de aprender como inicialmente pensé que sería.

Al menos Kleo tuvo un montón de risas con mis errores.

"No estaba hablando de eso… sino de esto." Ella entonces puso su mano sobre mi pecho.

Asentí y sonreí.

"Gracias a ti, fui capaz de despertar… y creo que hice la cosa correcta con Seryanna… ahora todo lo que queda por hacer es volverme lo suficientemente fuerte para limpiar el piso con Draejan." Dije con una sonrisa.

"Bien entonces."

Cerca de veinte minutos después, finalmente estábamos encima del bosque. En efecto, volar era por mucho mejor que ir en Khosinni.

"¿Por qué no hicimos esto desde el principio?" dije mientras me preparaba para saltar.

"Debido a que no quería lastimar los sentimientos de mi hermana… ella es una No Despertada sabes."

"Los dragones, especialmente la dragonesas, son muy susceptibles acerca de a quien llevan sobre sus espaldas. Además, ustedes nunca lo pidieron." Kataryna respondió.

"Ya veo… tiene sentido."

"Oh, antes de que te vayas." Kataryna se detuvo y me jaló hacia ella.

Enredó sus brazos alrededor de mí y me cubrió con sus alas.

"Un pequeño regalo de despedida." Me dijo sonriendo y luego me besó.

Estaba sorprendido por este repentino ‘ataque’, pero dado que era ella… lo acepté. Cuando partimos labios, ella me empujó de la espalda de Kleo.

"¡Regresa fuerte, joven cachorro! ¡Hazme estremecer de emoción la próxima vez que te vea!" gritó ella.

"¡Lo haré!" levanté mi pulgar y entonces caí entre los arboles parecido a como lo hacían en los dibujos animados… "Ouch! Omph! Ow! Ugh! Not the face! Ouch! Gah! Ouch! Omph! Ugh! Owie!"

¡THUD!

"¿Estás bien?" Kleo preguntó un poco preocupada.

Probablemente golpee cada una de las ramas en mi caída hasta aquí…

"¡Estoy bien! ¡Mi rostro suavizó el impacto con el suelo!"

[Punto de vista de Kataryna]

"Vamos de regreso… estará bien." le dije a Kleo.

"¿Estás segura? Estoy un poco preocupada."

"Sí. Además, nosotras dos también necesitamos entrenar."

"¡¿Huh?! ¿Por qué necesito entrenar?"

"Porque la Tercera Princesa necesitará cada gramo de poder de combate que ella pueda conseguir en sus manos. También, mientras permanezcas de débil como eres ahora… todos alrededor tuyo patearán tu trasero por ser de escamas negras. Necesitas probarles que no pueden hacer eso. Después de todo, tú también eres una Draketerus, ¿no es así?"

Kleo permaneció en silencio después de eso y siguió volando de vuelta hacia Drakaria. Ahora que Alkelios tomó su entrenamiento en serio, yo estaba pensando en entrenar a esta pequeña niña mientras el regresaba. Aun así, me volvía muy curiosa el ver que tanto iba a elevar su fuerza en los próximos meses.

Muéstrame algo divertido, Alkelios… pensé en mi mente mientras sonreía.

[Punto de vista de Alkelios]

Después de sacudir mi ropa, me cambié a mi recién adquirida nueva Armadura de Dracotinio y me equipé mi Espada de Dracotinio encantada. Las estadísticas de estas cosas eran ridículas, pero lo que iba a realizar requería de este ridículo factor…

Tomando un profundo respiro, grité desde el fondo de mis pulmones: "¡DESEO SOBREVIVIR TODOS LOS PELIGROS DE ESTE BOSQUE! ¡DESEO SUBIR DE NIVEL TAN RÁPIDO COMO SEA POSIBLE MATANDO MONSTRUOS Y HACIENDO ITEMS EN ESTE BOSQUE! ¡DESEO EN LOS PROXIMOS 9 MESES ALCANZAR Y PASAR EL NIVEL 1000! ¡¿ME ESCUCHAN?! ¡AHORA VENGAN A MI! ¡ENVÍENME TODO LO QUE TENGAN!"

Cuando terminé, tragué saliva y apreté la empuñadura de mi espada.

"¡RAWR!"

"¡GRAWR!"

"¡KYAKAKA!"

Repentinamente incontables rugidos se elevaron hacia el cielo. El suelo tembló y el aire se volvió más rígido a mi alrededor. Era como si todo el bosque me hubiera escuchado y ahora estaba respondiendo a mis deseos.

En frente de mi… miré una estampida moviéndose…

Tragué saliva.

"Aquí vienen…" dije y tomé otro respiro.

[Punto de vista de Seryanna]

Una semana después de que Alkelios se marchó y Kleo empezara su entrenamiento con Kataryna, yo me encontraba de camino hacia la Tercera Princesa cuando de pronto Draejan me llamó desde atrás de mí.

"¡Sir Seryanna! ¡Qué placer encontrarte después de todo este tiempo!" dijo, pero no me di la vuelta.

Me detuve y miré al suelo. Dentro de mi estaba un fuego vengativo que deseaba quemarlo y hacerlo cenizas, así que estaba haciendo todo lo posible para calmarme. Con mi Despertar en progreso, estaba un poco en el límite, y mirar el rostro de este bastardo era la última cosa que quisiera hacer.

"Sir Draejan, el placer no es mío, te aseguraré de eso. Ahora, si me permites, necesito seguir." Dije con un tono de voz un poco molesto.

"Espera un segundo." Dijo y puso su mano en mi hombro.

Me congelé en el lugar y apreté mi mandíbula.

"Solo voy a decirte desde la bondad de mi corazón, pero deberías olvidarte de ese humano sin valor. Él no es nada comparado con nosotros. Tú estás destinada a un lugar junto a mí liderando el grandioso Ejército Brekkar y convirtiéndote en la gema del Reino Albeyater. Un humano como el solo te habría traído vergüenza."

Cerré mis ojos por un momento y puse mi mano sobre la suya.

"Estaba seguro de que volverías a tus sentidos… ¡Ungh!"

Por supuesto que dolería, apreté mi mano y apliqué calor en ella. Dándome la vuelta lentamente, lo miré y vi que dragón de poco valor era él.

No puedo creer que tenía miedo de él… ¿Un rango mayor que el mío? Como si todavía me importara…

"¿S-Sir Seryanna?" parpadeó de la sorpresa mientras miraba mis ojos rojos rasgados.

"Draejan… te estoy diciendo esto desde la ‘bondad’ de mi corazón. Si te atreves a tocarme otra vez… voy a matarte." Entonces solté su mano.

Estaba segura de que mi repentino cambio fue una sorpresa y sacudida para él, pero no me importó. Mientras estuviera dentro los límites del Palacio y tuviera a mi amiga Kataryna de mi lado, este dragón no se atrevería a hacer algo estúpido. 

[9 meses y 1 día después de que Alkelios dejó el Palacio]

[Punto de vista de Alkelios]

"¡Itsy Bitsy BOOM!" grité desde lo más hondo de mis pulmones mientras liberaba el devastador ataque desde lo alto de las nubes.

La esfera de aproximadamente 3 metros de diámetro de un brillante color rojo fuego voló fuera de mi mano garrificada y se dirigió en dirección del ejército que elegí como blanco en estas tierras áridas. Estaba sonriendo cuando lo liberé… era uno de mis más poderosos ataques, y también era el más mortal hasta el momento.

"Estoy bastante curioso por ver qué es lo que va hacer…" me dije yo mismo.

Que mal que sus armaduras y materiales se vayan a convertir en polvo después de la explosión… pensé y me arrepentí un poco, pero no es como que no les haya advertido.

Eran un grupo de criaturas con forma de insectos que de repente arribaron a las costas del norte en el continente. Sabía que este lugar era árido, pero los monstruos de aquí no eran ninguna broma. Todos ellos eran mayores al nivel 700. Desafortunadamente, debido a que utilicé este lugar para cazar materiales y carne deliciosa, terminé casi arrasando con toda la fauna… así, obsequiándoles un pase libre hacia Albeyater. ¡Oops!

De cualquier manera, cuando estos monstruos llegaron, primero traté de negociar con ellos. Volé hacia ellos y tuve una pequeña charla con su comandante, quien estaba hablando con un dialecto draconiano quebrado. Les dije que más allá de este lugar se encontraba el Bosque Seculiar que pertenecía al Reino Albeyater. Continuando con sus ejércitos de esa forma solo invadiría sus fronteras… aparentemente esa era su intención… los bastardos sanguinarios trataron de asesinarme después de eso. ¡Si no hubiera llevado ninguna armadura, hubiera muerto!

Bueno… lo digo por su ejército, todos los 40000 de ellos.

El ataque lanzado hacia el ejército fue apuntado hacia su centro. Por supuesto, yo me encontraba fuera del rango de los 25 km, para ser más preciso, estaba volando por el cielo a una altura cercana a los 2 km y a una distancia de 30 km de su línea de vanguardia.

"3… 2… 1…" conté el tiempo antes del impacto.

¡BOOOM!

Los tres domos de contención fueron desplegados al instante y la devastación causada por ellos podía ser vista muy claramente. Engulló todo su ejército en un parpadeo y arrasó con las tierras áridas, aunque… no es que hubiera mucho que pudiera ser destruido aquí.

Como nota al margen, la ráfaga también engulló la mayoría de sus botes también, pero los sobrevivientes probablemente morirían debido a la radiación. Afortunadamente para mí, yo estaba vistiendo ropa interior de plomo. Era una precaución extra, pero realmente daban comezón cuando se frotaban contra mis escamas.

"Eso fue… asombroso."

No tenía ningún remordimiento destruyendo todo su ejército de insectos. Si no lo hubiera hecho, Seryanna y el resto seguro los habrían detenido, pero hasta que pasara, hubieran llegado a Tomeron, donde mi amigo Brekkar estaba actualmente viviendo. El número de dragones muertos como resultado de este repentino ataque ciertamente habría dado grandes pérdidas al reino.

Ahora, del gran ejército de 40000 insectos, no había ni siquiera ninguno para enviar una fuerza exploradora. Seriamente dudé que siquiera pudieran regresar a su hogar, donde quiera que este estuviera.

Encogiéndome de hombros, estaba a punto de irme, cuando repentinamente…

"¿Brillante?"

Sip… la explosión reveló un depósito oculto de minerales. Varios de ellos en realidad…

"¡BRILLANTE!" grité y volé en dirección hacia ellos.

Por supuesto, cambié mi armadura a medio vuelo a la armadura anti radiación que desarrollé en mi tiempo libre solo en caso que alguna vez utilizara esta habilidad. También saqué mi Piqueta de Aleación de Dracotinio-Dregario que había creado con mi habilidad de herrería.

Bueno, no había prisa en volver a Drakaria. Podía llegar en 4 o 5 días, dependiendo en que tanto me tardara en empacar todas mis cosas, pero hasta entonces… ¡era hora de minar!

¡Sip! ¡No había vergüenza en admitir el hecho de que yo era un jugador acumulador… mitad dragón!




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