100 Luck and the Dragon Tamer Skill! Arco 2-31.1

Capítulo 31: La Promesa Imposible (Parte 1)

[Punto de vista de Alkelios]

Regresamos a la superficie sin ningún problema. Ambos Iolaus y Kleo estaban a salvo, además, me encontré con que el gran paladín terminó desmayándose en algún lugar durante el trayecto. ¡Mi suposición era que probablemente vio una araña, gritó como una niñita, chocó contra un muro y fue luces fuera para el!

Mientras viajaba a través de esos oscuros y húmedos corredores, los monstruos de aquí nos dejaron pasar sin problemas, mientras que ninguna de las trampas fue activada. La mazmorra aparentemente estaba manteniendo su palabra, pero una vez que saliéramos de este lugar, estaba 100% seguro de que volveríamos a ser enemigos. Las Mazmorras en este mundo eran construcciones mágicas diseñadas para ayudar a los aventureros a subir su poder o a simplemente aplastarlos sin piedad. Como tal, solo mantenían funciones cognitivas básicas si es que ninguna.

Lo que me preocupaba a mí no era la mazmorra, sino el humano que fue capaz de teleportarse a este lugar. Lo que sea que le haya pasado lo convirtió en un monstruo incluso ante mis estándares. El odio irrazonable hacia la especie dragón probablemente fuera explicado si el aterrizó en algún campo de batalla, entonces pudo haber sido mejor para el agruparse con otras cruzadas humanas y atormentar sus fortalezas y castillos, tomando su tierra parte por parte.

La manera en que hacia las cosas era parecida a la de un niño que quería molestar a la gente. Desafortunadamente, él era un niño muy poderoso con la habilidad de irse al instante a cualquier lugar y en cualquier momento que deseara. Hasta donde puedo decir, no tiene límites, o más bien ninguno que pudiera identificar aún.

"Esto va a ser problemático…" me quejé saliendo de la mazmorra.

Afuera, el cielo estaba realmente nublado, advirtiendo una tormenta. Para la hora que era, no tenía idea, ¿tal vez de mañana? Adentro de la mazmorra, perdí el sentido de cuantas horas pasé vagando por esos oscuros corredores.

Además, era hora de que volviéramos con nuestros amigos y les contáramos las buenas noticias.

"Finalmente estamos afuera… ¡Creí que iba a morir ahí!" Kleo estaba aliviada de poder ver el cielo una vez más.

"Si lo hicieras, tu hermana de seguro me habría hecho excavarte de ahí con una piqueta. Considerando las probabilidades, podría llegar a encontrarte… eventualmente." Le mostré una sonrisa burlesca, y ella rio.

"Si, ¡eso puede ser cierto! ¡Hahaha!"

"Bueno, vamos de vuelta con ellos… deben estar descansando después de la larga batalla."

Llevando al inconsciente Paladín sobre su escudo, hicimos nuestro camino de vuelta a la villa. Las señales de una gran batalla estaban por doquier. El suelo estaba carbonizado, agrietado, y hecho pedazos. Era como si un monstruo alborotado fuera liberado aquí, o más bien dragonesas considerando todo.

No vimos ningún no-muerto en nuestro camino de vuelta. Con el tipo de la capucha lejos, la mazmorra probablemente volvió a sus actividades normales y llamó de vuelta a todas sus fuerzas. Fuimos pasados por un gran número de ellos en el camino, pero ninguno atacó.

Al llegar al pueblo, fuimos recibidos por una muy preocupada dragonesa pelirroja. Ella se apresuró al momento en que nos avistó.

"¡Alkelios! ¡Kleo!"

"¡Estamos de vuelta!" respondí meneando mi mano.

Deteniéndose frente a nosotros, Seryanna sonrió y dijo "Estoy agradecida de verlos a salvo. ¿Qué pasó?" ella miró atrás de nosotros al paladín noqueado y luego a mi "¿Está bien?"

"Erm, mucho… y de este sujeto, bueno… no lo sé." Me encogí de hombros y miré a Kleo "Aparentemente él la salvó…" Kleo lo confirmó asintiendo.

"¿Este tipo?" Seryanna no lo creía.

"Bueno, está bien por ahora. Vamos de vuelta al pueblo y comamos algo… ¡Me muero de hambre!" dije poniendo una mano sobre mi estómago para evitar que rugiese.

"Estamos un poco hambrientos y cansados…" Kleo sonrió débilmente.

"Entiendo…" Seryanna asintió y me abrazó. "Me alegro que estés bien, los dos."

Después de que dejamos el ‘equipaje extra’ con los paladines cercanos, fuimos guiados a una de las casas proporcionada para nosotros como refugio temporal. Aparentemente, los aldeanos estaban muy contentos por el hecho de que salvamos sus escamosas espaldas de la amenaza de una invasión de no-muertos.

Una vez que terminamos una comida saludable, yo y Kleo dijimos nuestras partes de la historia. No reparé en detalles y expliqué de manera precisa sobre lo que llegué a encontrar del tipo de la capucha, incluyendo que es un humano de mi mundo original.

"Si todos los humanos que vinieron de ahí son así de poderosos, entonces… podríamos enfrentarnos a una crisis." Dijo Kataryna frotando su barbilla.

Ambas Seryanna y ella habían estado escuchando con una expresión seria en sus rostros, pero esta era la primera vez que alguna de ellas decía algo.

"No lo sabemos con seguridad. Yo por ejemplo sé que tuve un crecimiento inusual debido a mi extrema Suerte y a mi habilidad [Domador de Dragón]."

"¿Por qué lo crees así?" dijo Seryanna.

"Estas habilidades fueron dichas de ser bastante únicas. Dado como son de ridículos los nombres la mayoría de las veces, alguien con una fría y racional cabeza sobre sus hombros intentaría encontrar un patrón o algo por el estilo con el fin de obtener las mejores habilidades posibles. Para ser honesto, ¡la mayoría de mis habilidades fueron obtenidas gracias y solo gracias a la Suerte!" dejé salir un largo suspiro mientras recordaba que tan confuso fue la primera vez.

"¿Por qué lo crees así?" dijo Kataryna.

"Tengo una habilidad llamada [Lightning Chicken!] la cual me deja invocar un Fénix de nivel 999 o superior."

"Punto a favor… yo pensaría que podrías invocar una delicada o divertida mascota con ella…" respondió Kataryna.

"¡Ah! Hablando de mascotas, ¿me pregunto qué le paso a tu ardilla? Nunca tuve la oportunidad de verla." Accidentalmente cambié el tema.

"Se detuvo a saludar cuando estabas experimentando en tu laboratorio. Se quedó en la mansión por unos pocos días. Abuelo está cuidando de ella, pero considerando la temporada, probablemente este por ahí afuera buscando pareja."

"Ya veo… muy mal. Estaba curioso de ver cómo era."

"Cuando lleguemos a la capital, podemos pasar a una tienda de mascotas, y te mostraré una." 

"Haaa… Yo nunca tuve una mascota." Kataryna sacudió su cabeza.

"¿No tuviste tiempo para una?"

"No… nunca encontré una que me gustara. No quiero tener una mascota que es… bueno… no se sienta bien conmigo." Se encogió de hombros dado que no pudo explicar bien la razón.

"Ya veo. ¿Qué hay de Kleo?"

"Yo hice un contrato con un habitante del Inframundo. Sujeto lindo, largas guadañas, acechando en las sombras, escucha mis órdenes mientras yo le suministre Energía Mágica." Ella describió algo terrorífico.

"Eso es un secuaz, no una mascota."

"Bueno, si te preguntas si tengo algo VIVO y de ESTE mundo, entonces la respuesta es no… no tengo. Como Kataryna, nunca encontré una… adecuada para mí." 

"¿Querías una mascota?" me preguntó Kataryna.

"Si…"

"Bueno, si puedes encontrar un monstruo recién nacido o un huevo, puedes intentar y domesticarlo como mascota. Si es una mascota de combate, aun mejor." Dijo Seryanna.

"¿Tu ardilla es una mascota de combate?"

"No. Es una mascota salvaje."

"¿Huh?"

"Hay mascotas adorables que mantienes para compañía. Esas tienden a pasar mucho tiempo alrededor de ti, disfrutando abrazos y siendo tiernas. Hay mascotas de viaje que puedes montar como los Khosinni. Hay mascotas salvajes o aventureras, que mantienes por unas pocas semanas, entonces las liberas en la naturaleza. Esas se detienen periódicamente para saludarte debido a que te ven como una parte de su familia o de su manada. Y están las mascotas de combate, las cuales te siguen a donde sea y en lugar de compañía, son más usadas para pelear junto a ellas." Explicó Kleo.

"Oh, y las mascotas salvajes también pueden ser usadas para establecer terrenos de caza para mantener fuera cazadores furtivos. Como parte de su familia o manada, estás permitido cazar en su territorio, pero atacará o vendrá a advertirte al momento en que vea un cazador o un depredador peligroso acechando alrededor." Agregó Seryanna a la explicación.

"Ya veo… Y yo que pensaba que TODAS ellas eran solo para abrazos y mimos."

"No, esas son solo las adorables. ¡Compañeros inocentes y muy sabrosos como comida de emergencia!" apuntó Kataryna.

"Erm…"

"¿Qué?"

"Nada."

Un momento de silencio cayó sobre nosotros, entonces Kleo y yo dejamos salir un gran bostezo. Mirando uno al otro, nos reímos.

"Deberíamos dirigirnos a la cama." Dijo Seryanna.

"En efecto. Los pasados días han sido… agotantes."

Suspiró Kataryna.

Con todo mundo de acuerdo, tomamos un baño rápido. Las dragonesas fueron primero, entonces yo fui después. Para ser honesto, intenté espiar, pero terminé siendo detenido cuando escuché la siguiente amenaza:

"No me importa si me espías, Alkelios, pero si espías a Kataryna o a Kleo, vas a dormir en la mazmorra."

Y antes de tener la oportunidad de hacerlo, me devolví con la cabeza agachada.

Esa noche, Kleo y Kataryna durmieron en una habitación, mientras que Seryanna y yo en la otra. A pesar de que nos besamos y abrazamos como una pareja haría, no procedimos al siguiente paso. Estaba demasiado cansado, y sentía que era demasiado pronto. Mis instintos adolescentes aun me estaban gritando que no fuera un gran idiota, pero había tiempo… no era como que Seryanna se fuera a ir a algún lado.

La siguiente mañana, me desperté cerca del mediodía. Yo era el único en la cama.

Con ojos apenas abiertos, estiré mis músculos un poco y caminé afuera del cuarto. Fui saludado por Kataryna.

"Buenos días, dormilón."

"¿Huh? Días… ¿Qué hora es?"

"Una hora pasada del mediodía. Dormiste por más de 48 horas." Se rio.

"¿Huh? ¡¿Tanto?! No sentí ni una cosa…"

"Ni tu ni Kleo. ¡Fufufu!" se rio otra vez.

"¿Huh?"

"Ustedes dos estaban más cansados de lo que deberían haber estado. Honestamente, estábamos empezando a preocuparnos, hasta que Kleo empezó a roncar, y tu murmurabas algo acerca de los senos de Seryanna en tu sueño." Se carcajeo.

"¿Qué? ¿Hice qué?" 

"Dijiste que eran muy elásticos y buenos al tacto… y que no te importaría tenerla como tu mujer por el resto de tu vida, para mimar, amar, cuidar, y hacer todo tipo de cosas junto con ella."

"¿Huh?" me estaba poniendo confundido y un poco asustado al mismo tiempo.

¿Qué tipo de cosas dije cuando estaba dormido? 

"¡Debiste verla sonrojarse! Ella incluso te abofeteo para despertarte, pero no hubo reacción." Kataryna se echó a reír.

"Urk…" me estaba avergonzando yo solo.

"Bueno, de cualquier manera, cámbiate y encuéntrate con nosotros en la cocina. Vamos a tener un desayuno ligero y después a partir." 

"¿Está todo bien?"

Asintió y respondió "Si. Después de que regresaron, no se presentaron más no-muertos, y la mazmorra regresó a la normalidad. El cielo también se aclaró, así que podemos viajar con comodidad."

"Ya veo… Bueno, estaré ahí." dije y regresé a la habitación.

¿De verdad dije todas esas cosas en mi sueño? ¿O ella está jugando conmigo? Me pregunté mientras me cambiaba.

Una vez que entré a la cocina, Seryanna se sonrojó como una damisela inocente y apartó la mirada.

"B-Buenos días, Alkelios."

Oh rayos… pensé cuando su reacción extremadamente honesta reveló la verdad de este asunto.

Kleo estaba disfrutando su filete. Yo comí en silencio. Ni una sola palabra fue dicha, ella gentilmente jaló la manga de mi camisa y agachó la mirada, sonrojándose tiernamente.

"T-Tu… ¿r-realmente amas así de m-mucho mi p-pecho?"

"Erm… amo todo de ti… pecho incluido…" sonreí.

Excepto por el hecho de que es un dragón. Un pensamiento salvaje apareció.

Ignorar fue usado. Ignorar fue súper efectivo. Pensamiento salvaje se desvaneció.

"Te amo, Seryanna." Dije, y mis brazos se envolvieron alrededor de ella, abrazándola cariñosamente.

Nuestros labios se tocaron, y le ofrecí un beso suave. Ella respondió con un lindo gemido y se acercó a mí.

"Ahí lo tienes, cinco plateados." Dijo Kataryna desde la ventana.

"Ugh… Aquí. Estaba segura de que ella se quedaría callada al respecto. Supongo que mi hermana es más audaz de lo que creí." Dijo Kleo mientras le daba las monedas.

Mirando ahí, vi a las dragonesas muy curiosas sacudiendo sus colas de alegría.

"Ustedes dos…" murmuré.

Mientras tanto, Seryanna estaba tratando de ocultar su expresión avergonzada.

Linda… pensé.

"D-Deberíamos irnos ahora…" dije con una sonrisa forzada mientras estaba muy avergonzado acerca de esto.

"Mhm…" Seryanna asintió en aprobación.

Después de ese extraño momento, empacamos nuestras cosas y nos dirigimos a donde teníamos ‘aparcados’ a los Khosinni.

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