100 Luck and the Dragon Tamer Skill! Arco 2-28.2

Capítulo 28: Atrapados (Parte 2)



[Punto de vista de Seryanna]

"¡No tienen fin!" grité.

"¡Son aburridos!" respondió Kataryna.

No podía culparla, ella estaba simplemente abofeteándolos y matándolos al instante. Me temía el pensar lo que fuera a pasar si ella usara sus hechizos o sus cuchillas.

"¿Tú crees que Alkelios estará bien?" preguntó ella.

"Estoy más preocupada por mi hermana."

"¿Lo dices por el hombre Paladín?" 

La dragonesa olvidó atacar, y un zombi estaba intentando de morder su antebrazo. Cuando se dio cuenta de él, ella lo golpeó en la frente y lo mando a volar. Yo corté tres esqueletos por la mitad y perforé el corazón de otro. Se desvanecían y se volvían polvo. Ninguna de nosotras se molestó en recolectar las pepitas de metal.

"Sí." Caminé cerca de ella para que los otros dragones no pudieran escucharnos. "Iolaus y Kleo eran… amigos de la infancia."

"¡Eso es sorprendente!" dijo ella y entonces decidió que era tiempo para escucharme, dado que mi historia era mucho más interesante que el ejército de no-muertos.

Recitando un hechizo, ella envió una ola de espigas de hielo hacia ellos. Incontables zombis, esqueletos y dullahans se convirtieron en nubes de humo en un parpadeo, y esto nos aseguró unos cuantos minutos libres. Pero esto era solo de nuestro lado, los Paladines seguían peleando con todo lo que tenían, además, no estaba segura de cuánto tiempo más ellos podrían mantener ese ritmo.

"¡Dime más de eso!" dijo mientras se aproximaba balanceando su cola de lado a lado y con una gran sonrisa en su rostro.

"Bueno, cuando éramos jóvenes, antes de que mi abuelo se enfermara y cuando nuestros padres seguían con vida, vivíamos en una mansión en la capital, Drakaria. Había muy pocos niños en el vecindario que estaban dispuestos a jugar con nosotros. Nuestra sangre noble y la reputación de mi abuelo hacían que sus padres estuvieran temerosos y cautelosos de nosotros. Solo adultos idiotas que creían que niños jugando juntos tenían el poder para empezar una guerra." Empecé a recordar los viejos días, fueron los más pacíficos de mi vida.

"El viejo cascarrabias no me golpeó como si fuera un gran noble allá en Tomeron."

"En ese tiempo lo fuimos, pero después de que se enfermó y de que mis padres murieran, nuestra casa declinó. Con el despertar de Kleo, el Templo de Luz y el Templo de Vida pusieron presión en el rey para que nos despojaran cuanto antes de nuestro poder hasta que fuimos forzados a dejar la capital. La única cosa que mantenía a Kleo sana y salva es mi status como caballero de la princesa y la antigua reputación de mi abuelo." Suspiré.

Justo ahora, me temía que incluso eso no sería suficiente y si se fuera a conocer que me enamoré de un humano, esto podría terminar… desastroso. Mi única esperanza era que la existencia de Kataryna y que Alkelios estaba del lado de los dragones actuarían como una carta de triunfo en el peor de los escenarios.

"Como estaba diciendo, Iolaus y Kleo eran amigos de la infancia. Mi relación con él es a lo mucho de conocidos. Él no venía de una familia rica, pero a él no le importaba nuestro estado de nobles. Era un buen dragón, pero entre más tiempo pasaban juntos él y Kleo, lo más apegados unos de otro se volvieron. Eventualmente, se enamoraron. Fue cerca de dos décadas después cuando el despertó como un Dragón de Luz. Fue reclutado por el Templo de Luz y se convirtió en un Escudero de Paladín."

"Entonces Kleo despertó, ¿cierto?"

"Si… entonces ella despertó… y ella era de Oscuridad, completamente el opuesto de su elemento."

"Dragones del elemento opuesto nunca pueden estar juntos…" dijo Kataryna agachando la mirada.

"Fue la peor cosa que les pudo haber pasado a ellos… Iolaus cambio después de eso, rompieron… ahora, el naturalmente la odia." Miré hacia los paladines.


Si solo ellos no existieran… pensé.

Esta era la otra razón del porque los dragones hombres nunca volteaban a ver a una mujer no despertada. Incluso si eran hermosas, su elemento era lo que más importaba. Si una era opuesta al suyo, entonces seria duro el hacer un huevo. En mi caso, con Alkelios era casi imposible, pero yo ya me había rendido con esa idea. Mientras al menos puedo estar a su lado, con eso era feliz.

"Es desafortunado, en efecto… *Sigh*, tal visión borrosa que tienen aquellos sin Despertamiento Avanzado." Dijo Kataryna suspirando.

"Aquí vienen otra vez." 

"¡Bien! ¡Me siento con ganas de golpear algo ahora!" ella sonrió.

[Punto de vista de Alkelios]

De alguna manera lo suponía después de que él dijo que dos no despertados nunca encontrarían felicidad. Él estaba seguro sobre eso, era casi como si él estuviera hablando en base a su propia experiencia. Aparentemente, ese era exactamente el caso.

"¿Así que tú y Kleo estaban juntos?" dije y recargué mi espalda en la pared.

"Sí." Asintió lentamente.

"¿Qué pasó?" 

"¿A qué te refieres? Ambos despertamos, y terminamos siendo del elemento opuesto. ¿No es eso obvio?"

"No realmente…" incliné mi cabeza.

"¡Hahaha! ¡Ahora entiendo porque no crees que tu futuro con Seryanna está en peligro! ¡No sabes lo que significa!" él se rio, y yo sentí que debía golpearlo en la cara, pero me abstuve; mi puño era demasiado bello para usarlo en su rostro.

"Dilo, ¿por qué es eso así?"

"Si ella resulta ser del elemento Fuego y tu del Hielo, ¡ustedes dos nunca serán capaces de tener un huevo juntos! ¡Es imposible!"

Apuesto todas mis habilidades a que, si deseo por ello, pasará. Pero qué pena, él no es consciente del hecho de que tengo 100 Suerte. Dejémoslo vivir en su ignorancia. Pensé sonriendo en mis adentros.

"La verdad no me importa, estoy seguro de que me las arreglaré."

"¡No lo harás! ¡Nadie se las arregla con algo como eso! ¡Fue por eso que Thraherkleyoseya y yo nunca pudimos estar juntos!"

"¿A qué te refieres? ¿No eran ustedes dos amantes? ¿Qué fue lo que cambió?"

"Realmente no lo entiendes, ¿no es así?" 

"Soy un idiota, así que ilumíname." Dije con una mirada aburrida en mis ojos.

"¡Hmph! Antes de que despertara, en efecto, estábamos enamorados. La amaba con todo mi corazón y todo mi ser. ¡Incluso nuestra primera noche juntos fue una absoluta bendición!" dijo mirando su palma.

"¡Espera! ¡Espera! ¡Espera! ¿Kleo no es virgen?" pregunté sorprendido.

"No. Estoy bastante seguro que tome su virginidad esa noche."

Lo golpeé en el rostro y lo envié volando contra el muro detrás de él.

"Ah… Oops." Dije cuando me di cuenta de que lo había hecho.

"¡Ugh! ¡¿Por qué fue eso?!" gritó mientras se agarraba su nariz, la cual sangraba.

"¡Lo siento! Reflejo…" dije y le ofrecí una poción.

Él la bebió y me miro de vuelta.

"¡¿Qué tipo de reflejo te hace golpear a la gente en la cara?!"

"¿Reflejo de hermano mayor? Ahora, continua con la historia." Dije con una sonrisa mientras trataba de no golpearlo otra vez.

Este bastardo… ¿Cómo se atreve hacerle eso a Kleo?

"*Sigh*… bien, después de que desperté como un dragón de elemento de Luz, fui reclutado por el Templo de Luz. Mientras esto pasaba, algo cambio… Aun amaba a Thraherkleyoseya, pero adonde sea que fuéramos juntos, se sentía raro. Entonces supe el por qué cuando ella despertó. Ella pertenecía al elemento de Oscuridad… mi enemigo natural."

"¿Cómo exactamente hizo eso que fuera tu enemigo? Aun la amabas, ¿cierto?"

"Si, y aun lo hago, pero no a la despertada Thraherkleyoseya. ¡Ella me traicionó convirtiéndose en eso! ¡No tienes idea lo que es sentirse traicionado de tal manera! ¡Cualquier cosa hubiera estado bien, pero Oscuridad era absolutamente lo peor! ¡Thraherkleyoseya se volvió un monstruo!" 

Lo golpee otra vez enviándolo a chocar en un muro cercano. El escupió y salpicó sangre de un diente que le quebré.

"Esta vez, no fue un reflejo."

"¡Bastardo!" saltó y me golpeó en el rostro.

No sentí eso, pero agarre su mano y lo patee en el estómago.

"¡Ugh!"

Lo golpeé en la cara y le rompí la nariz otra vez. Empujándolo contra el muro, su armadura se resquebrajo, y el luchaba por liberarse.

"¿Un monstruo dices? ¡Tú eres el monstruo!"

"Ugh… ¡Suéltame!"

Lo golpee en el estómago y lo arroje al suelo.

"¡Agh!" gimió y tosió un par de veces.

La armadura estaba agrietada, pero seguía ahí. Si no fuera por ella, probablemente lo hubiera lastimado más. En realidad, estaba sorprendido de que me las arreglé para controlar un poco mi fuerza. Tal vez fue un reflejo o pura suerte, pero si fuera a golpearlo con toda mi fuerza, lo asesinaría al instante.

"Dijiste que no tenía idea de cómo se sentía, ¿verdad? Bien, ¿sabes quién se sintió de esta forma por tu causa? ¿Lo sabes?" le pregunte mientras lo empujaba contra el suelo.

"N-No…" gimió y luchaba por levantarse.

"Kleo lo sintió. La traicionaste. Tú, el seguidor de la luz que grita Justicia esto y Justicia aquello fuera de sí, ¡tú la traicionaste de una forma peor que nadie más haya hecho!"

"¡Mientes! ¡Nunca la traicioné!"

Observándolo, lo agarre del collarín y lo levante.

"Entonces dime, ¿cómo le dices a alguien que dice que te ama, pero entonces te ataca solo porque tu cuerpo cambió un poco?"

"¡Ella no cambió un poco! ¡Ella es del elemento Oscuridad!"

"¿Y qué? ¡¿Acaso su personalidad cambio?! ¡¿Acaso su sonrisa cambio?! ¡¿Acaso su amor por ti cambio?! Espera, nunca la amaste, ¿verdad?" grité de puro coraje y entonces lo arrojé al piso. "Mis disculpas, estaba equivocado, tu nunca la amaste en primer lugar, así que mi enojo estaba desubicado." Le dije en un tono de disgusto y entonces le arrojé una poción de curación.

La tomó y me observó.

"¡La amaba! ¡Realmente la amaba! ¡Aun amaba a Thraherkleyoseya desde antes que despertara!"

Pisé sobre su pecho.

"No, no lo hiciste." Lo mire a los ojos. "Si la amabas, la habrías aceptado por completo. No te hubiera importado si era de Oscuridad, Fuego, Luz, ¡o incluso un maldito humano! ¡Tú la habrías amado y aceptado por completo! ¿No es eso lo que significa el verdadero amor? ¿Aceptar sin excepción? ¿De no tener dudas en tu corazón sobre ellos ni de mantener expectativas de ellos?"

No me respondió, solo me miraba a los ojos.

"Si la amas incluso ahora justo como dices, entonces harás todo lo que este a tu alcance para estar a su lado. Pelearás contra los dioses de ser necesario… Eso es lo que es el verdadero amor… si, suena absurdo, pero desafortunadamente, esa es la verdad." Removí mi pie de su pecho y lo dejé ahí.

En la siguiente esquina, me detuve y me recliné en la pared. Mi cuerpo estaba temblando, y estaba respirando con dificultad. Todas esas cosas que dije, todas esas palabras y la forma en que me comporté no eran para nada como yo. Sabia de eso en teoría, leí de ello en historias, juegos, pero la seguridad que tenía en esas palabras era anormal…

Ahora, después de que la adrenalina pasó, no me podía reconocer yo mismo. Pensando de vuelta en esas palabras, era como si las estuviera diciendo a mí mismo y no a él. Era como si me estuviera advirtiendo yo mismo y no a Iolaus.

¿Acaso dije todas esas cosas debido a mi habilidad [Domador de Dragón]?

Era posible. De vuelta a cuando Seryanna y Kleo estaban en problemas, esta habilidad transformó algo dentro de mí. Era una chispa de coraje, algo que me empujó hacia adelante y me dijo que las rescatara y ayudara. Si era instinto o no, no podía decirlo, pero estaba ahí.

Después de lo que pasó ahora, podía recordar claramente que yo había tenido momentos así antes, pero no me había dado cuenta de ellos. Esta sensación manifestada a través de unas pocas palabras, o una mirada, o algo pequeño, pero esta vez, con Iolaus, fue la primera vez que reaccioné de una manera tan violenta y extraña.

En realidad, difícilmente podía recordar lo que él dijo o como se miró cuando dije esas cosas. Todo lo que puedo recordar fueron esas palabras, aunque un poco cambiadas: si la amabas, la habrías aceptado por completo. No te habría importado si era humana o no. Tú la habrías amado sin mantener ni una sola duda en tu corazón.

Repetí esas palabras en mi cabeza una y otra vez mientras pensaba sobre Seryanna. Sabía que se suponía que yo las siguiera, sabía que eran la verdad, pero mi corazón me decía que aún me faltaba algo… que yo aún no estaba ahí. Yo no podía aceptar o amar a Seryanna enteramente por quien o que era, pero no sabía por qué.

Era como tratar de mirar una pintura oculta detrás de una cortina de humo. Sabías que la pintura estaba ahí, pero no podías ver su belleza.

¿Por qué soy de esa forma? Me pregunté mirando mis manos temblorosas.

"¡Kakaka!" el sonido de un esqueleto me sacó de mi extraño estado mental.

Debo aclarar mi mente… abrir a la mitad unos cuantos cráneos debería ayudarme a lograrlo… Sí. Pensé mientras me levantaba y apretaba mis puños.

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