100 Luck and the Dragon Tamer Skill! Arco 4-76

Capítulo 76: Opuestos Totales


[Punto de vista de Alkelios]

Estos Dayuks eran por mucho más débiles que los que me encontraba en el Bosque Seculiar. En realidad, ninguno de ellos tenía melenas hechas de agujas de metal, así que me preguntaba si en efecto eran el mismo tipo de monstruos en primer lugar.

Viéndolos me recordó a aquel que miré cuando conocí por primera vez a mi amor, Seryanna. A pesar de que era una versión corrupta, todavía era mucho más poderoso y feroz que estos perros. La diferencia en niveles probablemente era enorme.

Kalderan parecía ser más un asesino que un cazador de monstruos con esas SMG con las que estaba armado. El ver esas armas en este mundo me sorprendió por completo, pero estaba seguro de que eran el resultado de una habilidad concedida por la Entidad Divina.

"Gracias por salvarme, pero yo solo me las pude haber arreglado contra ellos." No había señal de apreciación en su tono de voz.

Si me preguntan, sonaba lleno de reproches.

"De nada. Oh, ¡déjame ayudarte con eso!" dije casteando [Heal] sobre él.

La Energía Mágica que salió de mis manos cubrió sus heridas con una bella luz de blanco puro. Dejé que la energía fluyera todo el tiempo necesario para sanarlo por completo. Por lo que podía ver, tenía un brazo roto, tal vez una o dos costillas quebradas, muchas lesiones, varios cortes y un montón de marcas de mordidas. Ciertamente peleó contra los Dayuks con lo mejor de su ser, pero en manada eran simplemente muy fuertes para él.

"¡Listo!" dije con un tono de victoria cuando terminé.

"¿Me curaste?" lo hizo sonar como si dudara de mi trabajo.

"Si."

¿Por qué está actuando tan a la defensiva conmigo? Además del pensamiento de que tal vez creyera que soy un espía del Continente Dragón, no se me ocurría otra cosa.

Sin embargo, en mi forma actual no era diferente a un humano si hablamos de apariencia física. Lo que sucedió en aquella villa fue un error de mi parte. Solo estaba tan sorprendido de ver a una verdadera oveja come pasto, que accidentalmente olvidé cambiar a mi forma humana ante los lugareños.

Tal vez si le digo que soy un héroe como él, ¿se relaje un poco? Pensé y apunté a sus armas "Esas son ametralladoras ¿no es así? ¿SMG? No son armas de este mundo."

"Si. ¿Como sabes eso?" entrecerró sus ojos hacia mí como si fuera alguna clase de individuo sospechoso.

"¡Bueno, yo también soy de la Tierra! Nací en Rumania, ¿qué hay de ti?"

"Nada que te incumba."

Eso no fue muy agradable.

"Escucha, aprecio que me ayudaras y todo lo demás, pero no me llevo bien con otros Héroes. Así que, si no pido demasiado, ¿puedes simplemente dejarme solo?" me preguntó con un no tan buen tono en su voz.

A pesar del hecho de que literalmente acabo de salvar su vida, estaba actuando más o menos como un cretino. Juzgando por la cantidad de daño que tomó por parte de los monstruos, iba a suponer que él no era tan poderoso en primer lugar. Las armas modernas pudieron haberlo ayudado demasiado, pero balas simples realmente no hacían mucho en contra de monstruos poderosos que escalaban más allá del nivel 200.

Kalderan miró a los Dayuks muertos y luego dijo "Puedes tenerlos como agradecimiento por salvarme la vida, así que dejémoslo así. Adiós."

Lo vi dándose la vuelta dirigiéndose a otro lugar.

¿Me miro como alguien que da lo que sea por este tipo de monstruo? Pensando eso me di cuenta de que el tipo se estaba alejando de mí.

"¡Oye, espera!" lo llamé mientras empezaba a caminar hacia él.

Me observó y luego empezó a correr.

¿Qué rayos? Estaba sorprendido por sus acciones.

Era como si tratara de escaparse de mí. ¡En realidad, no lo estaba intentando, realmente quería escaparse de mí!

Para su mala fortuna, era mi boleto para comprender el lenguaje local, así que corrí tras de él. Comparado con un Despertado Avanzado, este tipo era increíblemente lento. Tan lento que me hacía preguntarme si me daría tiempo de ir y construir un castillo para cuando llegara a salir del bosque.

"Sabes, soy un muy buen corredor." Le dije con una sonrisa amigable en mi boca.

Kalderan me observó e intentó perderme zigzagueando a través del bosque.

Eso tampoco funcionó.

Me le adelanté y me detuve frente a un árbol.

"¿Realmente pensaste que podrías escaparte de mí con tu velocidad?"

"¡Tch!"

Antes de darme cuenta, me apuntó con sus armas y tiró del gatillo. Ese era un sonido que no había escuchado en un largo tiempo, pero estas balas eran… lentas. Atrapé algunas de ellas en el aire y dejé que las otras rebotaran en mi armadura.

"Un poco decepcionante. ¿Por qué no les encantaste?"

"¡Tch!"

"¡MUY BIEN, escucha!" dije aplastando las balas en mi mano y tirando la bola de plomo que quedó como resultado. Sus ojos se enfocaron en ella, y pude ver sorpresa en ellos. "¡No entiendo por qué estás tan a la defensiva conmigo, pero atacarme de la nada no es algo muy lindo que debas hacer!"

Para ser honesto, si no se tratara de un traductor andante que yo necesitaba, simplemente lo habría golpeado en su estómago y luego me iría a visitar la ciudad. No había razón para permitirme el ser tratado de esta forma por cualquiera.

"Ustedes los de Niveles Altos solo saben cómo molestar a los débiles. ¡Todos ustedes son lo mismo!" replicó y me apuntó de nuevo.

"¿De eso se trata?" dije con un tono de voz bajo.

Finalmente entendí por qué estaba actuando como un cretino conmigo a pesar de que lo había salvado. Desde el principio, me veía como un enemigo debido a que yo era de un nivel más alto que él. Es verdad, probablemente era ridículamente más poderoso que lo permitido para esta región o incluso para el reino, pero esto no significaba que estaba bien tacharme como el tipo malo apenas conociéndonos. Esto me molestaba, y en serio estaba debatiéndome en si en verdad era tan importante o no su capacidad traductora.

Si simplemente dejaba a este sujeto aquí o solo le daba un puñetazo que lo mandara a volar sobre la montaña no se veía como algo tan malo. Afortunadamente para él, a pesar de ser tratado de esta forma por un don nadie, aún tenía la decencia de entender la diferencia en poder entre los dos y de lo que podría pasar si lo golpeo de esa forma…

"¿Es así? ¿Qué los de alto nivel se aprovechan de los débiles?" dije desenvainando a Hell.

Desde adentro de mi espada, una sombra oscura empezó a salir y engulló toda el área a nuestro alrededor. Risas de locura y chirridos de garras se escuchaban desde adentro. Un árbol de repente se marchitó y otro tenía cortadas de garras muy profundo en su tronco.

"¿Así que a los de alto nivel les gusta molestar a los débiles?" lo dije de nuevo levantando la cuchilla al nivel de mis ojos haciendo que pareciera que algunas manos sombrías estuvieran tratando de quitarme el arma de mis manos y de llevarla al suelo.

"¿Q-Qué estás haciendo? ¡¿Qué es todo esto?!" dijo Kalderan empezando a sentir un poco de miedo.

Descargó sus ametralladoras en mis sombras, pero esas patéticas piedritas de plomo no podían hacer nada en su contra.

"Aquí voy… a molestar al débil." Dije y me apresuré hacia él.

Cuando me vio me apuntó con sus pistolas, pero yo ya había aparecido a su derecha. Hice un tajo en el aire y corté el suelo a su derecha. El suelo tenía un corte profundo como si una garra gigante hubiera rasgado en esa área.

Volví a dar otro tajo y otra marca apareció a su izquierda. El hombre retrocedió y olvidó jalar el gatillo. Así que utilicé este momento para saltar y acercarme, agarrarlo por el cuello y aventarlo contra el suelo con su espalda.

Antes de que pudiera figurar que había ocurrido, robé sus armas, clavé su capa con mi espada e hice que las sombras lo sostuvieran como si se trataran de un montón de demonios hambrientos que no podían esperar para desgarrar su carne.

"Siendo alguien de nivel alto, ¿te he molestado lo suficiente?" le pregunté con una sonrisa amable mientras se escuchaban carcajadas de locura de las sombras a mi alrededor.

"¿Q-Qué?"

Lo tomé del cuello de su ropa y lo levanté al nivel de mis ojos.

"Te pregunté: Siendo alguien de alto nivel, ¿te he molestado lo SUFICIENTE ahora?" grité y le di un puñetazo en su abdomen, asegurándome de contenerme BASTANTE.

Incluso así, el pobre hombre vomitó su desayuno y gimió del dolor. Por supuesto, evité su vómito.

"¿Tal vez esto no fue suficiente? ¿Huh?" me dije mientras lo agarraba del cuello y lo arrojaba hacia el cielo.

Al momento de verse en las alturas empezó a gritar. Pude haber volado tras de él, pero quería probar [Pika Boo Blink] y ver cómo funcionaba.

La activación era la misma que con todas mis otras habilidades. Pero el timing estaba un poco atrasado en comparación, y cuando la activé, me encontraba solo a unos cuantos pies detrás de él. Me empujé a mí mismo con un hechizo de viento y rápidamente busqué por un lugar seguro para aterrizar.

Vi un cuerpo de agua y calculé las posibilidades de que muriera cuando hiciera contacto. Las probabilidades eran bastante altas.

Agarré a Kalderan por la parte de atrás de sus ropas y lo jalé conmigo mientras gritaba y meneaba sus brazos. Apuntando en el medio del pequeño estanque, detuve nuestra caída con un hechizo de viento y lo dejé caer al agua. Era lo mismo que caer desde una altura de tres o cuatro metros desde el aire.

Hizo un *splash* ruidoso, pero no estaba herido de ningún lado. Aterricé junto a él y me mantuve de pie sobre la superficie del agua con magia. Literalmente estaba caminando encima de ella.

Saqué a Hell y la apunté hacia él.

Kalderan ahora me miraba con diferentes ojos. Finalmente entendió que podía tomar su vida en un parpadeo. Si realmente quisiera matarlo, lo pude haber hecho con facilidad en cualquier momento.

"Creo que dejé muy en claro mi punto. Si, soy mucho más fuerte que tú por diferencias abrumadoras. Podría pulverizarte a ti y a ese pueblo humano inferior en una fracción de segundo si lo quisiera. Pero eso es lo que parece que no entiendes o tal vez no di a conocer mi punto con más claridad. Yo NO QUIERO hacerlo, y absolutamente no tengo NINGUNA RAZÓN para hacerlo. ¡SI tú me atacas y deseas convertirte en mi enemigo, confía en mí, necesitarás más que un ejército para siquiera poner un rasguño en mi armadura!" entonces lo observé a los ojos por un momento como lo haría con un monstruo salvaje que quisiera que retrocediera ya que estaba muy aburrido de pelear con él.

Cuando lo vi tragar saliva, hice mi espada para atrás y la envainé.

"Si me quieres como tu enemigo, soy tu enemigo. Si me quieres como tu amigo, soy tu amigo. No tengo idea de que fue lo que te pasó con otros héroes de alto nivel por estas partes, pero además de ti y de otro idiota, nunca he conocido a otro Terrícola. Lo dejo a ti si me quieres creer o no, pero te voy a decir esto ahora para que así no me tenga que repetir en un futuro. No soy del tipo que moleste a aquellos más débiles que yo. Nunca lo hice y nunca lo haré. Eso es algo que solo los cobardes hacen." Dije con un tono de voz firme liberando algo de magia de autoridad.

Arrodillándome, le ofrecí mi mano para sacarlo del agua y le dije "Por qué no empezamos esto desde el principio sin prejuicios ni etiquetas, ¿te parece? ¡Hola! Mi nombre es Alkelios Yatagai, provengo de Rumania."

Entonces esperé y me mantuve en silencio para ver qué es lo que iba a hacer. Si se rehusaba a tomar mi mano, simplemente lo dejaría ahí. No había necesidad de tratar de ser amigo con alguien que no le agradaba la idea. Era su propia elección, y yo hice lo mejor que pude para hacer que esto funcionara.

Para mi suerte, él no era un bastardo testarudo.

"Kalderan… Mi nombre es Kalderan Brahmin… Soy de Rusia." Dijo tomando mi mano.

Le mostré una sonrisa y lo levanté.

"¡Ves! ¡No fue tan malo!"

"No… Pero ¿estás caminando en el agua ahora mismo?"

"Nah, solo redirijo la Energía Mágica para mantenerme a mí mismo a flote. Nos llevaré a la orilla en un parpadeo." Dije y luego salté.

Kalderan se sujetó con fuerza, y luego aterrizamos a salvo en tierra.

"¡Ahí vamos!"

"Realmente eres algo… ¿Es en serio que no eres como los otros de Alto Nivel?"

"No sé cómo son, pero yo no soy alguien que se burlaría de alguien más débil que yo. ¡Si lo hiciera, sería lo mismo que reírme de mi mismo la primera vez que aterricé en el Bosque Seculiar!"

"¿Bosque Seculiar? Nunca he escuchado de ese lugar."

"O tal vez lo olvidaste. La Entidad nos dijo que no nos acercáramos al Continente Dragón ¿cierto? Adivina a donde me lanzó."

"De ninguna manera…"

"¡Oh sí que hay manera! Vamos, deberíamos levantar el campamento. Se está haciendo tarde."

"Si, esa sería una buena idea…"

El comienzo fue algo turbio, pero al menos nos las arreglamos para sobrepasarlo. Ahora todo lo que tenía que hacer era encontrar y conocer un poco más sobre este mundo y también aprender el lenguaje que la gente usaba.

[Punto de vista de Elleyzabelle]

Bajo la tutela de mi madre, fui capaz de mejorar mi alcance dentro y fuera de la red política de nuestro país. Mientras que era interesante el ver en que nobles podía confiar y en cuales no, era bastante sorprendente el saber que mi influencia podría fácilmente extenderse hasta los países cercanos.

Si uno sabía como jalar los hilos dentro de su propio país, entonces podrían influir también en el desarrollo y economía de uno extranjero.

Actualmente, el Imperio Embryger fue golpeado terriblemente por la pérdida de una parte de su ejército, así como de un número significativo de Despertados Avanzados. Fueron forzados a cambiar la locación de sus tropas y de reforzar las fronteras que ahora carecían de ellas. Esto puso una presión sobre su economía, lo cual garantizaría que no iban a realizar ningún ataque insensato.

Los países vecinos de Embryger también sufrieron una pérdida si es que le ofrecieron sus tropas durante la guerra civil de Albeyater, o experimentaron un impulso económico si no lo hicieron. Nuestros embajadores por todo el continente ahora se encontraban en una nueva posición que Embryger.

Aunque prácticamente no fue decisión de la Emperatriz el atacarnos, el hecho es que su hijo, un príncipe, parecía el querer que la Emperatriz misma declarara la guerra con Albeyater. Si hubieran ganado, no habría sido tanto problema para ellos, pero gracias a que perdieron, esto dejó una marca dolorosa tanto en su historia como en su fama.

Esta victoria nuestra hizo que los otros reinos nos miraran de un punto de vista diferente, como un poder político con estatus equivalente como el más grande imperio en todo el Continente Dragón. Los tratos de comercio mejoraron y aquellos que menospreciaban a mis padres por querer la paz ahora se mordían la lengua.

Nuestra economía estaba al alza, y nos recuperamos del daño hecho a nuestro Reino por el traidor Draejan.

Madre se las arregló para convencer al embajador del Reino Lorak simplemente mencionando la ridícula cantidad de soldados que nuestro enemigo perdió hace tres años. Me dije colocando la carta de respuesta del embajador en el escritorio.

Junto a ella había una copia de la carta que mi madre envió a esa dragonesa que hizo que cambiara de parecer.

Dejando salir un suspiro, miré a mi izquierda donde yacía una pila de documentos que necesitaban mi atención inmediata. Mi hermano no desperdició ningún esfuerzo enseñándome todo lo que sabía acerca de cómo manejar el reino.

Me recliné en mi silla y pensé acerca de aquel que hizo todo esto posible.

Alkelios… Un Héroe humano que se enamoró de una dragonesa y entonces salvó a la Reina, mi madre, de su muerte. Su ayuda entonces se extendió hacia el Reino Albeyater en la forma de traer de vuelta al campo de batalla al General Brekkar, reclutando a la rumorada Kataryna Greorg, y probando que alguien de Escamas Negras y Escamas Blancas puede enamorarse. Los dioses deben haberse enamorado de este mortal por ser capaz de lograr tanto… y más aún, lo cambiaron a mitad dragón. Luego cerré mis ojos.

Si un varón con tanto poder y autoridad apareciera en cualquier reino del Continente Dragón, las dragonesas de todo el continente intentarían tenerlo para ellas. A pesar de que aprobara el poder de Alkelios, él no era alguien de quien pensara fuera invencible ante los encantos de una mujer.

¡Si el no tuviera a Seryanna y Kataryna de su lado, definitivamente habría caído en el control de esas víboras escurridizas! Pensé y abrí mis ojos "Considerando la cantidad de amenazas y propuestas que recibió de ellas tan pronto la guerra terminó, creo que mi madre hizo la elección correcta de juntarme en un matrimonio político con él."

A diferencia de su relación con Seryanna y Kataryna, su relación conmigo era estrictamente platónica. No dormiría con él o le pediría que me bendijera con un huevo. Este matrimonio era un símbolo a través del cual Alkelios estaba atado a la familia Real Seyendraugher. Esto garantizaba el lado político donde se encontraba. Después de todo, Seryanna todavía era mi caballero y también un miembro de mi grupo.

En otras palabras, el tener a Alkelios casado conmigo en papel, haría que las propuestas de matrimonio enviadas se asuman sean de un estatus social más alto que el de una Princesa y también desafiaría por completo la influencia y poder de la Realeza Seyendraugher.

Era dudable que otra Familia Real fuera a intentar extender su alcance sobre nosotros por tales medios, pero otro noble debilucho no se atrevería a hacer ningún avance sobre Alkelios.

Bueno, no era como que todos los Despertados Avanzados en el Continente Dragón no pasaran por apuros similares, pero no tenían los mismos registros en su trayectoria. La cantidad de logros registrados por este Héroe humano era asombrosa en comparación de ellos, haciendo que su valor político y militar fuera absolutamente sorprendente. Si uno fuera a tomar en cuenta su valor económico como un Herrero y Alquimista Divino, entonces él se encontraba en un nivel donde países enteros se atreverían a amenazarnos con guerras para poner sus manos sobre él.

Para nuestra fortuna, no había tales idiotas que no fueran capaces de entender que elegir ese tipo de medios para llegar a él solo haría que se convirtiera en su enemigo jurado. Tal vez el hecho de que se desvaneció al término de la guerra también hizo difícil para ellos el tener por objetivo algo que no podían ver.

Si Seryanna estaba en lo correcto con respecto a lo que me dijo ayer, entonces solo teníamos que esperar para ver a Alkelios de nuevo. Tan pronto como la flota estuviera lista, zarparíamos hacia el Reino Ten Swords para recogerlo.

Aun así, todavía tenía que figurar como iba a contarle acerca de nuestro matrimonio político. Tal vez dejar que Seryanna le diera las noticias sería la mejor opción.

Tomé un respiro profundo y exhalé con lentitud.

"A pesar de que es tan poderoso… ¿por qué no puedo verlo un buen material para desposar?" me pregunté a mi misma y luego cubrí mis ojos con mi mano "Es poderoso, es ingenioso, pero… simplemente no me siento atraída hacia él… solo puedo verlo como un amigo, pero definitivamente no como alguien con quien querría compartir mi cama." Dije levantando mi mano.

Mi dedo anular todavía estaba vacío, esperando por la persona correcta que robara mi corazón…



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