100 Luck and the Dragon Tamer Skill! Arco 4-89.2

Capítulo 89: Regreso al Presente (Parte 2)


"Cuando no entendía que es lo que estaba dando por perdido y que es lo que obtenía a cambio, pensé que perder mi lado humano era igual a perder mi humanidad, y miré esta posibilidad con mi corazón lleno de miedo. Un amigo mío me ayudó a entender que el no ser humano no significaba que ya no tenía humanidad. Si voy a ese caso, creo que vi más humanidad en los dragones que en los mismos humanos. Cambiar de especie y aceptar mi mitad dragón fue probablemente la decisión más maravillosa que pude haber elegido solo después de casarme con Seryanna."

"¿Qué pasaría si fueras a descubrir que los humanos y los dragones volvieran a estar en guerra?"

"Me iría al lado de mi Reina, Elliessara Seyendraugher, y lideraría la batalla como el Duque Yatagai Draketerus." Dije mirándolo a los ojos.

Mi convicción estaba clara en este asunto. Mi elección y lealtad ya estaban declarados desde el momento en que acepté ser esposo de Seryanna. Mi edad podría haber otorgado el grado extra de certeza, pero de ninguna manera pensaba de forma inmadura. Entendía muy bien mis responsabilidades, y aceptaba y apoyaba las elecciones que mi esposa tomara.

"Han pasado tres años desde que la viste ¿no es así? ¿Qué si ya se casó con alguien más?"

Este pensamiento ya había cruzado por mi mente, sentí que era un poco ridículo viendo en quien se estaba aplicando.

"Lo dudo mucho siendo sincero, pero en el caso de que lo hiciera, las leyes del Reino Albeyater aceptan la existencia de parejas casadas con relación monógama, así como relaciones poliginias y poliandrias." Respondí, pero una parte de mi esperaba que Seryanna permaneciera fiel solo a mí.

"Así que, ¿acepta las relaciones poliamorosas?"

"Creo que sí, pero lo que tengo entendido, es que mientras las relaciones poligámicas son las más comunes entre la sociedad, la tendencia general es la monogamia."

Ahora que lo pensaba, el Rey era igual, así como Kleo y algunos de los Príncipes y Princesas de la nación. Hasta donde recordaba, nunca vi parejas del mismo sexo. Pero de esto nunca fui informado, o al menos no me molesté en preguntar.

"Mientras tanto, en Ten Swords se rechaza la idea de la poligamia a menos que seas un individuo de alto rango en la nobleza. Incluso entonces, más que tener varias esposas, lo que tienen son múltiples amantes."

"Ya veo. Por cierto, ¿has pensado en qué tipo de habilidad quieres adquirir después?"

Cambiando el tema, para ahora, tenía un entendimiento básico del poder de Kalderan. Además del que lo dejaba actuar como un traductor con piernas de todos los lenguajes conocidos, su otra capacidad, la cual decía que se llamaba [Toyman], le permitía conjurar Energía Mágica constructiva, y con un poco de práctica podía incluso moldear la materia en la forma que deseara. Era una habilidad impresionante que le veía un uso más apropiado en las manos de un ingeniero. La razón de eso es porque requería que el usuario conociera cada detalle de dichas construcciones.

En otras palabras, no podía construir cosas como rifles de plasma que veía en los videojuegos o copiar mis espadas Heaven y Hell. Las SMG que utilizaba eran el resultado de incontables prueba y error. Fueron el resultado final de su paciencia y práctica.

"Sinceramente, no tengo idea, y estoy un poco asustado de abrir esa ventana en caso de que me tope con una habilidad que no me será de ninguna utilidad."

"¿Quieres escuchar mi opinión?"

Me miró por un momento y asintió "Seguro, ¿por qué no?"

"Antes de abrir la ventana de habilidades, imagina que habilidad prefieres y desea por ello."

"¿Así que juego con la probabilidad?"

"Te ayudaré, ¡no debes preocuparte tanto al respecto!"

"Incluso si lo que dices en realidad funciona por medio de algún motivo más allá de las leyes de la razón, ¿qué tipo de habilidad debería desear?"

"Hm… Esa es la parte difícil. Puedes pedir algo que aumente de forma natural tu capacidad para aprender, como afinidades mágicas. También por una habilidad de mejoramiento físico o una de creación. Sin embargo, las mejores habilidades son aquellas que pueden complementar o reforzar en gran medida tus habilidades existentes. En mi caso, mis armas y armadura son el resultado de dicha habilidad."

"Entonces… ¿algo que refuerce a mi [Toyman]?"

"Sí."

"Hm…" cerró sus ojos y cruzó sus brazos.

Mientras él pensaba eso, yo seguí moviendo la leña y tomé un vistazo a los otros grupos. No veía al comerciante por ningún lado, pero cada vez que pasaba al lado de esos carruajes negros, sentía la fuerte esencia de tanino, el cual era un químico usado en el proceso de curtir cuero. También sentí la esencia de otras cosas, incluido vinagre y limón, y unas cuantas más que no reconocía.

La más prominente esencia de todas era la de muerte… casi como si hubiese cuerpos en descomposición escondidos detrás de las cortinas de los carruajes. Esto me preocupaba, pero al mismo tiempo, también era una esencia que muy seguido sentía cuando pasaba cerca de una carnicería, así que era posible que se tratase de carne echada a perder.

Mi mejor suposición era que el comerciante transportaba probablemente algún tipo de alimento y productos para curtido. Aun así, no veía la necesidad por carruajes de aspecto sospechoso. Otra vez, era posible que un simple comerciante de alimentos fuera capaz de emplear a tantos aventureros, ¿entre los cuales había tres que sobrepasaban con creces el nivel de poder de los otros cuatro?

También es bastante curioso que pase la mayor parte del tiempo dentro de esos carruajes…

"Quiero algo que pueda mejorar mis armas. Vi como imbuías tu espada con Energía Mágica en incontables ocasiones, y quiero algo como eso, en lo posible, con mis balas."

"Eso es grandioso. Entonces deseo que la próxima vez que elijas una habilidad, recibas una que te ayudará a imbuir tus armas con Energía Mágica."

"Como si eso fuera a pasar."

"Mhm~ Solo escoge una ahora."

"¿En serio sugieres que utilice mis preciosos puntos de habilidad en algo como esto ahora?"

"En realidad sí, eso sugiero."

"¿Qué?"

"Solo confía en mi esta vez y sígueme la corriente."

"…"

No podía culparlo por estar un poco escéptico, pero desde mi punto de vista, esto no podría llegar en mejor momento. Después de todo, ya tenía la resolución de que es lo que quería, y no es como que esos puntos de habilidad se fueran a ir a algún lado. Sin embargo, las habilidades si se desvanecían cuando alguien las escogía.

"¿Tienes algo que perder?"

Me miró por un largo momento y luego se enfocó en la fogata. Estaba pensando muy en serio sobre esto, pero su indecisión era un claro resultado de fracasos pasados de otros héroes así como de sí mismo. A diferencia de él, yo no conocía tales fracasos. Mi suerte tiene la culpa en esto. Cualquier habilidad que yo deseara, la recibiría como si se tratase de la primera y más lógica opción a pesar de lo ridículo de los nombres.

Luego de diez minutos, Kalderan finalmente me dio su respuesta: "Lo haré."

"Bien."

Abrió la ventana que solo era visible para sus ojos y se puso a observarla por un tiempo. Sus ojos se movían por toda la lista y los entrecerraba cuando se acercaba a algo, pero mi deseo y mi Suerte harían posible que ‘sintiera’ y tomara la mejor habilidad que se ajustara a sus requerimientos.

Era algo muy difícil juzgar solo por nombre. Especialmente dado que no sabíamos cuántos puntos de habilidad costaría conseguirla.

"¿Y bien?"

Solo asintió.

Le mostré una sonrisa y me puse de pie.

"¡Eso es grandioso! Iré a patrullar el perímetro un poco. Mientras tanto, puedes experimentar con ella. Si tienes suficiente, puedes incluso mejorarla y avanzarla al siguiente nivel."

"Seguro… y gracias…"

"¡De nada!"

Ya de pie, me fui a dar una vuelta por el campamento. Los otros dos grupos me estaban ignorando por completo, y el comerciante no se podía ver por ningún lado. Solo por curiosidad, me acerqué a uno de los carruajes y pensé en asomarme un poco adentro. Fue entonces cuando sentí a uno de los individuos del grupo de tres acercándose a mí a una velocidad sin igual. Decidí no reaccionar por ahora, pero mantuve mi guardia solo en caso que tratara de atacarme.

"¿Qué crees que haces?" dijo con su espada desenvainada y sosteniéndola en el aire a unas dos palmas de mi rostro.

Podía ver mi propio reflejo en la hoja.

"¿Qué demonios?" dije pareciendo sorprendido.

El sujeto misterioso me estaba viendo con una mirada perforadora. Solo sus ojos negros eran visibles, el resto de su cabeza estaba cubierta con una capucha. Al juzgar por su voz, le calculé que estaba en sus treinta y tantos.

"Estaba curioseando, eso es todo."

"La próxima vez, te voy a cortar la mano. ¡Ahora lárgate de aquí!" dijo enviando una onda de intento asesino.

Hm… Ni siquiera hace cosquillas.

De la esquina de mi visión, vi como enfundaba su espada y regresaba con sus compañeros.

Definitivamente no están transportando bienes consumibles. Debería mantener un ojo sobre ellos…

Luego de regresar a la fogata, me fui a dormir. Al siguiente día llegaríamos a la Villa Lineas. Si quería descubrir que es lo que ocultaban, debía hacerlo en el trayecto antes de llegar a la Ciudad Leveder.





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